La mañana de este lunes el padre de Pola Álvarez, la enfermera que fue apuñada 11 veces en la Clínica Cordillera, entregó detalles sobre la salud de su hija. En su relato contó que Pola debió ser internada nuevamente en un recinto médico, debido a complicaciones en su salud.
En conversación con el matinal de TVN, Patricio Álvarez reveló que la profesional "había tenido una recuperación bastante rápida, lo que nos había sorprendido a todos, pero la semana pasada, el día jueves, en un control rutinario en la Asociación Chilena de Seguridad se le descubrieron unos pequeños trombos, tanto en las piernas como en sus dos pulmones, lo que obligó a tenerla internada durante 4 días".
Tres días después, la Policía de Investigaciones (PDI) detuvo a Patricia Henríquez -ex compañera de trabajo de la víctima-, y a su pareja Enrique Hanson por el hecho. La primera es sindicada como autora intelectual del crimen y el segundo como autor material.
Respecto a la complicación que tuvo la enfermera agredida, su padre manifestó que "el fin de semana pasado, el anterior, empezó a sentir sus extremidades adormecidas, muy hinchadas y habló con las personas de la ACHS, quienes le hicieron un escáner dentro de la semana y los obligó, a partir de los resultados, a dejarla internada".
Agregó que Pola "está con miedo de estar sola, si siente un ruido se altera y eso hace que la recuperación no sea tan rápida como nosotros esperábamos".
"Sabemos que este es un tema lento, sobre todo la parte sicológica, para toda la familia y especialmente para Polita", sentenció el progenitor.