Fuego, destrozos y amenazas se registraron durante este jueves en el Instituto Nacional, donde estudiantes encapuchados y vestidos con overoles blancos volvieron a protagonizar hechos de violencia en el emblemático recinto.
El ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, señaló en Canal 24 Horas que "esto tiene una complejidad bastante grande, porque estos estudiantes —que son realmente violentos— pueden atentar contra la vida de sus propios compañeros y quizá también contra la de sus profesores y profesoras".
"Si bien hemos impulsado la aplicación del manual de convivencia y reglamento interno, cuando han sido identificados estos estudiantes —después del debido proceso— pueden ser probablemente expulsados. Esas familias podrán llegar al Ministerio de Educación y pedirme a mí un espacio para poder continuar el proceso educativo, y yo garantizaré la reubicación de esos estudiantes porque el derecho a la educación no puede ser conculcado", añadió el secretario de Estado.