Gran polémica desató el empate sobre la hora del Paris Saint-Germain ante el Newcastle en Champions League gracias a un dudoso penal.
Y es que el gol de Kylian Mbappé llegó en los descuentos del partido y luego de una discutida decisión del árbitro Szymon Marciniak, quien sancionó con la pena máxima una mano de Tino Livramento luego de revisar la jugada en el VAR.
"Creo que no fue penal. Lo que la repetición no muestra es la velocidad con la que se produce la acción. Golpea primero en el cuerpo, esa es la clave. Si golpeara primero en el brazo seguiría pensando que no es penal, pero quizás podría tener razón. Pero cuando toca primero en una parte de su cuerpo y luego sus manos están abajo, no es penal. No nos debería haber costado el partido", expresó molesto Eddie Howe, entrenador del Newcastle.