Sin duda una de las escenas más polémicas que dejó el partido del Manchester United ante Barcelona (0-1) por la Liga de Campeones, fue cómo quedó Lionel Messi luego del codazo de parte de Chris Smalling.
El defensa inglés se negó a pedir disculpas por la jugada, argumentando que la jugada se debió "a la intensidad" del partido que impusieron los Diablos Rojos.
"Teníamos que llevar el partido a una intensidad a la que ellos no están acostumbrados cada semana y nos jugábamos mucho en la segunda parte", argumentó.
Respecto al partido disputado en Old Trafford, Smalling valoró que "les presionamos y les pusimos las cosas complicadas. Fue una lástima no poder marcar un gol. Pienso que creamos algunas buenas situaciones de gol para haber marcado".