Con un verdadero escándalo finalizó el partido entre Rosario Central y Peñarol por la primera fecha de la Copa Libertadores, donde el elenco argentino se quedó con el triunfo por 1-0. Y es que el jugador del cuadro uruguayo Maximiliano Olivera, recibió un proyectil en la cara y terminó herido.
El violento hecho ocurrió tras el final del partido disputado en el estadio Gigante de Arroyito cuando desde las gradas cayó un objeto -que sería una piedra- que impactó en la cara de Olivera, quien perdió sangre, manchó la camiseta y, muy alterado, debió ser contendido por sus compañeros porque reaccionó con insultos hacia los fanáticos locales.