El equipó Infantil B del FC Barcelona ganó el World Challenge Cup, luego de derrotar por 0-1 al equipo Omya de Japón.
Tras el final del partido los pequeños del elenco japonés lloraban desconsolados por no haber logrado coronarse como campeones, por lo que sus rivales españoles se acercaron a ellos y los abrazaron como gesto de consuelo.