Tras recibir un duro castigo de dos años de suspensión por dar positivo a un control de doping previo al Mundial de Qatar 2022, el jugador argentino Alejandro "Papu" Goméz reapareció y compartió un comunicado oficial en sus redes sociales.
En el escrito, Gómez detalló el caso en su contra y explicó que el consumo de la sustancia prohibida fue "accidental e involuntaria".
"En primer lugar, confirmo que en el día de ayer me fue notificada resolución del Comité sancionador antidopaje de la Comisión Española para la Lucha Antidopaje en el Deporte, por la cual se acuerda la suspensión de mi licencia federativa por un periodo de dos años", comenzó diciendo.
Y luego aclaró: "Desde siempre, no solamente he cumplido estrictamente toda la normativa sino que me he posicionado como un férreo defensor del deporte limpio y la deportividad, condenando y rechazando categóricamente toda forma de dopaje". Y dejó en claro: "Nunca he tenido ni tendré la intención de recurrir a una práctica prohibida".