Con un equipo alternativo, Barcelona mantuvo su invicto en la Liga de Campeones tras superar por 2-1 al Inter de Milán, equipo italiano que en la previa se ilusionaba con la siguiente fase, pero que pese las constantes ocasiones de gol que se generó, fue derrotado ante el equipo de Arturo Vidal.
En el primer tiempo fue el Barcelona quien abrió la cuenta tras una de las primeras jugadas en la que el conjunto blaugrana pisó el área rival y que tuvo a Arturo Vidal como "protagonista", ya que obligó al error de la defensa del Inter.
"Griezmann cambia el ritmo de la jugada y la filtra para Arturo Vidal en el punto de penalti, pero toca Godín y le queda el balón a Carles Pérez, que no perdona ante Handanovic", relató Mundo Deportivo sobre la jugada.