La final del Mundial de Qatar que protagonizaron Argentina y Francia sigue generando reacciones. Ahora fue el turno del árbitro de la final, Szymon Marciniak, quien se defendió de las críticas de la prensa gala que acusó que el tercer gol de la albiceleste debió haber sido anulado.
"¿Cuál fue el impacto de los jugadores que se levantaron y entraron al campo? Para anularlo debería afectar afectar al partido", comenzó explicando.