El Real Betis goleó 4-1 al Aris Limassol de Chipre por la cuarta fecha de la fase de grupos de la Europa League, donde Claudio Bravo fue titular y destacó con una gran actuación, pero que terminó con preocupantes molestias musculares.
Cuando el reloj 84 minutos, Aleksandr Kokorin marcó el 3-1 transitorio, momento en que el portero chileno salió a achicar, pero al intentar volver a su portería se le observó cojeando. Fue el primer aviso.
Pero lo peor vino minutos después en un ataque del Aris Limassol. Bravo estuvo espectacular en un mano a mano, despejando un peligroso disparo. Sin embargo, de inmediato se tocó el sector posterior de su muslo izquierdo.
Bravo fue atendido por el cuerpo médico sobre el césped y debió aguantar los últimos minutos del partido, pues el técnico Manuel Pellegrini había realizado todos los cambios.