Niklas Stoepel es el único deportista de Alemania que practica nado sincronizado en su país y realizó una queja porque en los Juegos Olímpicos no pueden participar hombres en su disciplina.
En los primeros Juegos Olímpicos de la historia que incluirán a mujeres en todas las delegaciones, Stoepel reclama la discriminación que vive. "Los hombres no pueden participar en el nado sincronizado de los Juegos Olímpicos y los campeonatos mundiales. Eso me parece discriminación", dijo.
Este estudiante de ingeniería mecánica practica nado sincronizado desde los 14 años y entrena a pesar de las burlas de sus compañeros. "Cuanto más lo hago, más ganas tengo", señaló. "Me da igual lo que opinen otras personas. Son los mismos clichés que hay sobre los hombres que hacen danza. Y los mismos prejuicios: No soy gay", aseguró.
A juicio del joven de 20 años, la incorporación de los hombres a esta disciplina podría impulsar esta especialidad ya que "habría más hombres dedicándose a ésto. Además transformaría el deporte porque los hombres tienen más fuerza, pero menos agilidad".