Gil de Ferrán, leyenda brasileña del automovilismo que conquistó en 2003 las 500 Millas de Indianápolis, falleció este viernes de un ataque al corazón mientras competía en el circuito The Concours Club de Opa-Llocka, en el estado de Florida.
El poseedor del récord de velocidad en pista en la serie CART con una vuelta a 241,428 millas (388,54 kilómetros) por hora, competía hoy con su hijo menor Luke.
Según distintos medios periodísticos estadounidenses, De Ferrán detuvo su automóvil y manifestó que no sentía bien. Minutos después fue trasladado a un hospital, pero nada se pudo hacer para salvar su vida.