Sin embargo, horas más tarde, Groves apuntó a "pervertidos misóginos" por su baja de Tokio, por medio de un mensaje en su Twitter.
"Que esto sea una lección para todos los pervertidos misóginos en el deporte y sus lamebotas. Ya no puedes explotar a las mujeres jóvenes y las niñas, la vergüenza corporal o las presiones médicas y luego esperar que te representen para que puedas ganar tu bono anual. Se acabó el tiempo", posteó en su cuenta en Twitter.
"Haz que los pervertidos se estremezcan de miedo por la cantidad de personas que apoyan una declaración que amenaza su existencia", señaló también.
Cabe recordar que Maddie ya había realizado graves acusaciones por situaciones vividas en su deporte, apuntando incluso a "entrenadores conocidos".
Tras estas denuncias, la federación australiana de nado Swimming Australia declaró a través de un comunicado que se habían contactado con la deportista.
"Swimming Australia se acercó a Maddie en diciembre de 2020 para preguntar sobre un tweet enviado por ella que hacía referencia a un posible abuso por parte de alguien relacionado con la natación", subrayaron.
Finalmente, sentenciaron que “Maddie se negó a proporcionar más información y tampoco tenemos quejas previas de Maddie... Swimming Australia se toma muy en serio todas las acusaciones sobre abuso infantil o conducta sexual inapropiada".
“Consideramos primordial el bienestar, la seguridad y el bienestar de los niños y los jóvenes, y tenemos el deber de hacer averiguaciones para mantener los estándares de nuestro deporte”, cerró el escrito.