Una aplanadora. Así fue Inglaterra en su debut en el Mundial de Qatar 2022, donde goleó por 6-2 a Irán y mostró sus cartas de favorita.
Un doblete de Bukayo Saka, el primer gol con la absoluta de Jude Bellingham y los tantos de Raheem Sterling, Marcus Rashford y Jack Grealish desvelaron el poderío de los de Gareth Southgate, que comienzan viento en popa el Grupo B, y dejan tiritando a la Irán de Carlos Queiroz, que tuvo que conformarse con un intrascendente doblete de Mehdi Taremi.
A los pocos minutos, un centro de Kane provocó una salida de Alireza Beyranvand, un choque con un compañero y una imagen escalofriante. Golpe mentón con mentón y el portero caído en el suelo. Tras unos diez minutos de asistencias, Beyranvand consiguió levantarse, con el tabique dañado, y para incredulidad del respetable, siguió jugando. Duró apenas un minuto. Esta vez fueron las asistencias, con una camilla, las que se llevaron al guardameta. Fue sustituido en el minuto 19 por Hossein Hosseini.
No se habían cumplido ni 20 minutos y habían pasado más cosas que en jornadas enteras de liga, pero faltaba el gol e Inglaterra, muy cómoda ante una decepcionante Irán, encontró la puerta pasada la media hora.
El gol desarboló al ya de por sí poco estructurado conjunto de Queiroz y en los siguientes diez minutos se fulminó el partido. Para el 2-0 volvió a aparecer Maguire, bajando un córner, entre dos defensores, para que Saka colocase en la escuadra una volea espectacular; en el 3-0, Kane ejerció de asistente, con un centro al primer palo que embocó Sterling, el más rápido.