Roger Federer deleitó a los asistentes de Wimbledon con una notable jugada durante su partido por la tercera ronda del Grand Slam.
El suizo venció por 6-4, 6-2 y 6-2 al estadounidense Sam Querrey en un partido en el que solamente se vio exigido en el primer set.
El ganador de siete coronas en el césped londinense le quebró el saque a su rival en el noveno game del set inicial y no tuvo más problemas.
Luego se quedó con el saque de Querrey dos veces en los otros sets y cerró el partido en una hora y 21 minutos. En la próxima ronda se medirá con el australiano Sam Groth.