El COVID-19 causa una enfermedad más grave que la gripe estacional, según un estudio que compara datos de más de 130.000 personas hospitalizadas, donde quedó demostrado que la tasa de mortalidad entre aquellos con coronavirus fue tres veces superior a la de los pacientes con gripe estacional.
Se trata de un estudio basado en datos franceses de 89.530 pacientes con COVID-19 entre el 1 de marzo y el 30 de abril de 2020, y 45.819 hospitalizados con gripe estacional entre el 1 de diciembre de 2018 y el 28 de febrero de 2019.
Los resultados publicados en The Lancet Respiratory Medicine reflejan que, en el punto más álgido de la pandemia, los pacientes contagiados con coronavirus que fueron ingresados en el hospital fueron casi el doble de aquellos que fueron hospitalizados por gripe, también en su punto máximo de 2018/19.
Según el análisis, la tasa de mortalidad entre los hospitalizados con COVID-19 fue tres veces mayor que el de la influenza estacional: 15.104 de 89.530 ingresados (16,9%) frente a 2.640 de los 45.819 pacientes con gripe (5,8%).
Asimismo, una mayor proporción de las personas con COVID-19 experimentaron una enfermedad grave que requirió cuidados intensivos, en comparación con los pacientes que tuvieron gripe (16,3% frente a 10,8%).
Los científicos del Hospital Universitario de Dijon y del Instituto Nacional de Salud e Investigación Médica de Francia, señalan que la diferencia en la tasa de hospitalización puede deberse en parte a la inmunidad existente contra la gripe, resultado de una infección previa o la vacunación.
El COVID-19, por el contrario, es una enfermedad nueva en el que se espera que muy pocas personas tengan inmunidad previa. En este sentido, los expertos recalcan que sus conclusiones refuerzan la importancia de las medidas para prevenir la propagación de ambas enfermedades, especialmente ahora que se superponen.