La Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (SBIF) confirmó que a través de Twitter se produjo la tarde de este miércoles una filtración masiva que contenía datos de un número aproximado de 14.000 tarjetas de crédito, pertenecientes a distintos emisores nacionales y extranjeros.
La publicación del archivo fue hecha por el grupo de cibercriminales autodenominado ShadowBrokers, que publicó el número de tarjeta, el número de seguridad (CVV) y la fecha de expiración de estos productos.
Debido a ello, el organismo se contactó con las entidades afectadas, instruyéndolas a tomar las medidas para resguardar a los clientes titulares de las tarjetas afectadas, comunicarse de forma clara y oportuna con ellos y tomar todas las acciones de seguridad necesarias para aclarar el origen del incidente.