Cientos de personas llegaron enardecidas hasta un juzgado en la localidad de Yapacaní, en el departamento boliviano de Santa Cruz, exigiendo que les entreguen a uno de los cuatro hombres acusados de violar a un niño de 11 años, quien fue contagiado con VIH y que está en terapia intensiva.
La turba furiosa rebasó a la policía cuando el hombre de 23 años salía del juzgado tras su audiencia de medidas cautelares, comenzando a golpearlo y a tirar piedras y palos al establecimiento, según varios videos que han sido difundidos por las redes sociales.
En la zona, la gente desvistió al hombre e incluso advirtieron con cercenar sus genitales en forma de castigo. Luego de alrededor de cinco horas, la policía logró sacar al hombre de la turba en la madrugada de este miércoles.
El sujeto fue acusado junto a sus hermanos de violar a un niño, quien este martes cumplió 11 años, y producto abusos sexuales sufridos contrajo VIH y que ahora se encuentra en terapia intensiva.
Dos de los presuntos agresores son menores de edad, de 15 y 17 años, y los otros dos de 23 y 28 años de edad. Este último falleció el año pasado por la enfermedad.
Este hecho causó indignación y conmoción en la población boliviana, que pide justicia para el niño.
En la audiencia de medidas cautelares del hombre de 23 años se determinó que guarde detención preventiva en la cárcel de Palmasola en Santa Cruz, la más conflictiva del país, por 180 días mientras se realicen las investigaciones, indicó el fiscal asignado al caso Julio César Bustos.
Por eso, luego de rescatar al hombre de la turba, este fue trasladado hasta el penal en medio de un fuerte resguardo policial.
En tanto, el otro aprehendido, que es menor de edad, fue remitido a un juzgado de la niñez y estará detenido en el centro de rehabilitación Cenvicruz, de acuerdo con información del Ministerio de Justicia.
El tercer acusado está "prófugo" y ya se emitió la orden de aprehensión.