Un increíble y exitoso caso médico se registró en República Checa, donde los médicos del Hospital Facultativo de Brno, lograron que un bebé naciera tras pasar más de cuatro meses en el vientre de su madre con muerte cerebral.
Como detalla el medio español La Vanguardia, en abril pasado, la joven madre fue hospitalizada debido a una hemorragia cerebral, producto de una malformación genética.
Debido a sus 16 semanas de gestación y al ser diagnosticada con muerte cerebral, se decidió mantener su respiración y signos vitales, para llevar a término el embarazo.
Luego de 117 días, el 15 de agosto pasado y por medio de una cesárea, nació Eliska, el bebé que pesó más de dos kilos y midió 41 centímetros, lo que ha sido considerado por el equipo médico que llevo el caso como todo un éxito y único en el mundo.
Según detallaron los médicos, se mantuvo la actividad pulmonar de la mujer, además del trabajo de sus riñones y se controló que el flujo de alimento hacia el bebé fuese el necesario para que este ganara peso.
Además, se simularon las condiciones normales de un embarazo: a la madre le hacían masajes en su vientre, familiares de la mujer ponían música en la habitración para que fuese escuchada por el bebé, le leían cuentos y hasta instalaron una máquina que simulaba el movimiento de la madre, para que el bebé notara que todo estaba normal.