Ahmed Shafik, el último primer ministro de Hosni Mubarak, podrá competir en las elecciones presidenciales de Egipto el fin de semana, luego que una corte constitucional falló en contra de una ley que pretendía sacarlo de carrera.
El tribunal también declaró que algunas normas de la elección parlamentaria que le dio el control legislativo eran inconstitucionales. El jefe de la corte indicó que la Cámara baja deberá ser disuelta.
La decisión provocó varias reacciones. Mientras Shafik calificó el fallo de "histórico", el legislador de los Hermanos Musulmanes Essam El-Erian se mostró en completo desacuerdo.
"Si se disuelve el Parlamento, el país va a entrar en un túnel oscuro", dijo Erian. "Hay un estado de confusión y muchas preguntas", agregó.
Por su parte, el ex candidato presidencial Abdel Moneim Abol Fotouh escribió en su página de Facebook que la medida equivale a un "golpe de Estado total".
Este fin de semana se celebrará la segunda ronda presidencial entre Shafik y Mohamed Morsy, de los Hermanos Musulmanes.
A pesar de las declaraciones de El-Erian, los Hermanos Musulmanes dijeron que aceptarían la decisión. "Es ahora una realidad y tenemos que lidiar con ella", indicó el portavoz Mahmoud Ghozlan.