El administrador de la NASA, Bill Nelson, dijo a finales del mes pasado que la agencia revelará el 12 de julio la "imagen más profunda de nuestro Universo que jamás se haya tomado", gracias al recién operado telescopio espacial James Webb.
"Si lo piensan, esto es más lejos de lo que la humanidad ha mirado en su historia", señaló Nelson durante una rueda de prensa en el Instituto de Ciencia del Telescopio Espacial en Baltimore, el centro de operaciones del observatorio de 10.000 millones de dólares que fue lanzado en diciembre del año pasado y ahora está orbitando el Sol a un millón de millas (1,5 millones de kilómetros) de la Tierra.
Según otro comunicado, las imágenes eran tan bellas que casi hicieron llorar a Thomas Zarbuchen, administrador asociado de la Dirección de Misiones Científicas (SMD) de la NASA.
Al relatar su primer encuentro con los datos del Webb, Zurbuchen mencionó que él también estaba asombrado de lo que el telescopio había demostrado ser capaz. Dijo que casi lloró al ver las primeras fotos tomadas por el nuevo instrumento.
"Es realmente difícil no mirar el universo bajo una nueva luz y no tener un momento profundamente personal", dijo. "Es un momento emotivo cuando ves que la naturaleza libera de repente algunos de sus secretos", agergó.
Telescopio Webb responderá preguntas que aún no conocemos
Una maravilla de la ingeniería, el Webb es capaz de mirar más lejos en el cosmos que cualquier otro telescopio anterior, gracias a su enorme espejo primario y sus instrumentos que se centran en el infrarrojo, lo que le permite mirar a través del polvo y el gas.
"Va a explorar objetos del sistema solar y atmósferas de exoplanetas que orbitan otras estrellas, dándonos pistas sobre si potencialmente sus atmósferas son similares a la nuestra", añadió Nelson, hablando por teléfono.
"Puede responder a algunas preguntas que tenemos: ¿De dónde venimos? ¿Qué más hay ahí fuera? ¿Quiénes somos? Y, por supuesto, va a responder a algunas preguntas que ni siquiera sabemos cuáles son".