Seis días antes del devastador terremoto que ha dejado más de 4.000 muertos, Nepal celebraba el Día Internacional de los Monumentos y los Lugares. Un recorrido en bicicleta por los siete monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco que se reúnen en este pequeño territorio y que ya no volverán a contemplarse como aquel 18 de abril.
El sismo de 7.9° en la escala de Richter ha convertido al valle Katmandú, en un valle de escombros. La propia capital, Patan o Bhaktapur son ejemplos del arte y la arquitectura nepalí, con sus numerosos templos y estatuas construidos entre los siglos XII y XVIII. Muchos de ellos, como la torre Dharhara, ya no volverán a fotografiarse. Al menos, no como antes.
El símbolo de Katmandú, también llamada torre Bhimsen, había conseguido salvarse del sismo de 1934, tras del cual se reconstruyó. Sin embargo, en esta ocasión, nada quedan de los nueve pisos y los 200 escalones construidos en 1832 y que se habían convertido en uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad.