La Justicia argentina resolvió determinar prisión perpetua para los tres sujetos sindicados como autores de la "Masacre de Panambí", donde murió un padre, una madre, una hija y un hijo en la provincia de Misiones, Argentina.
Según consigna el portal trasandino TN, después de un mes de debate la Justicia los declaró culpables de torturar y quemar viva a una familia durante un robo el 25 de mayo de 2014 a tres individuos: el exintegrante de la Prefectura Naval Pablo Julio Paz, Juan Ramón Godoy y el mecánico Marcial Alegre.
Aunque aún resta encontrar a dos eventuales cómplices de la masacre, el fallo significó un gran avance y alivio para el único sobreviviente, otro hijo de la familia, Carlos Knack.
"Fue una larga espera que hoy tuvo un final. Fue una tortura para mí escuchar todo lo que se oyó en el debate, pero ahora al oír esta sentencia me siento conforme. Esta gente va a ser perdonada, pero va a tener que pagar en esta tierra lo que hizo a mi familia", expresó Carlos a los medios trasandino.
Una fotografía antigua de la familia Knack.
LA NOCHE DE LA TRAGEDIA
Carlos Knack se salvó de morir incinerado sólo por minutos, había viajado a ver a su familia desde Corrientes y antes del ataque se retiró de la casa para ir a dejar a su pareja.
Los delincuentes irrumpieron en la casa armados y encapuchados. Allí se encontraron con el empresario maderero Óscar Knack,su esposa Graciela Mojsiuk, su hija Bianca y su hijo Cristian, quienes miraban tranquilamente la televisón. Ataron a todos mientras revolvían los muebles en busca de dinero en efectivo que posteriormente encontrarían.
Luego de ello y queriendo borrar toda huella del delito, acrecentaron el crimen. Derramaron un líquido inflamable en la habitación y sobre las víctimas, y les prendieron fuego. Los ladrones escaparon con su botín y la familia luchó con todas sus fuerzas para salir con vida. En medio de las llamas consiguieron desatarse y a golpes tirar la puerta abajo.