Tras la muerte de cuatro niños víctimas de un ataque con un hacha en Brasil, el gobernador de Santa Catarina, Jorginho Mello, señaló que "expreso mi total solidaridad, que Dios conforte el corazón de todas las familias en este momento de profundo dolor".
A través de redes sociales, la autoridad ha expresado su "enorme tristeza" por este "lamentable" suceso en el que "un asesino" atacó a varios niños y a sus profesores.