El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, estuvo presente en el memorial de las víctimas de las explosiones en una planta de fertilizantes en West, en Texas, donde quiso honrar el trabajo de las fuerzas de seguridad y los bomberos que perdieron su vida durante la catástrofe
Durante el funeral, celebrado en la Universidad de Baylor en Waco, Obama aseguró, frente a cientos de amigos y familiares de los fallecidos, que “no hay palabras para honrar su trabajo".
El pasado 17 de abril, esta planta de fertilizantes al oeste de Texas estalló, por causas todavía no aclaradas, terminado con la vida de 14 personas.
"Nos reunimos aquí en Texas para llorar a los valientes hombres que pasaron por el fuego y todos aquellos que han sido separados de nosotros", dijo el presidente.
Obama también agradeció el coraje y la compasión de los vecinos y familiares ante la catástrofe.
"Damos gracias por el coraje y la compasión y la increíble gracia de la gente de West".
Frente a una docena de ataúdes de voluntarios y bomberos, cubiertos con la bandera de Estados Unidos, Obama aseguró: "Somos vecinos, somos americanos, estamos con ustedes y no olvidamos".
Obama asistió al acto acompañado por su mujer, la primera dama Michele Obama, luego de comparecer junto a otros cuatro ex presidentes de Estados Unidos en Dallas, reunidos para la inauguración de la biblioteca presidencial de George W. Bush.