La primera atleta transgénero en unos JJ.OO.
Laurel Hubbard es la primera atleta transgénero que participará en unos Juegos Olímpicos y su presencia en Tokio 2020 ha causado ruido entre sus rivales.
La pesista neozelandesa, de 43 años, participará en la categoría más alta (+ 87 kilos) después de que su país la eligiera como representante al cumplir con todos los criterios de elegibilidad establecidos por el Comité Olímpico Internacional (COI) que, a partir de 2015, permite a deportistas en transición al género femenino estar presentes en la instancia bajo ciertos parámetros hormonales.
Según informó Marca, Hubbard tiene chances de hacerse con una medalla y su participación en Tokio 2020 habría sido bien recibida por sus compañeras de equipo. "Me siento agradecida y honrada por la amabilidad y el apoyo que me han dado tantos neozelandeses", señaló la deportista en un comunicado emitido por el Comité Olímpico de Nueva Zelanda.
Sin embargo, quienes no piensan igual son sus rivales en los juegos. Tal es el caso de Anna Van Bellinghen, deportista belga que competirá en su mismo peso, quien dijo que "cualquiera que haya entrenado levantamiento de pesas a un alto nivel sabe que esto es cierto. Esta situación en particular es injusta para el deporte y los deportistas. Es una broma de mal gusto".
Asimismo, el presidente de la federación española, Constantino Iglesias, expresó que "sinceramente, no me parece nada justo. Hay que aceptar las normas del COI, pero es un tema que no está resuelto y que debe estudiarse en el futuro".
"Yo he visto competir a esta persona cuando lo hacía con los chicos. Seguramente no se hubiese clasificado para la prueba masculina y en cambio aquí tiene opciones de medalla Está claro que por ley, ahora mismo, es legal, pero es injusto porque tiene más fuerza y su masa ósea no puede cambiar en poco tiempo", agrego.
No obstante, también hay quienes apoyan a Hubbard. La haltera española Alba Sánchez indicó sobre el tema que "estas personas deben ser aceptadas. Sufren en el transcurso hasta ser cien por cien mujeres, en el sentido del cambio de las hormonas. Esa persona transgénero debe ser reconocido por la persona que es ahora y no la que era antes".
"Eso de que no pueden competir porque tienen más fuerzas que una mujer por naturaleza es falso porque se demuestra en el análisis hormonal. Esa parte no va a influir mucho y por eso me parece bien", finalizó la atleta europea.