Luego que el Gobierno anunciara una serie de restricciones de ventas de productos con una nueva definición de "bienes esenciales", el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Manuel Melero, solicitó a las máximas autoridades autorizar la venta de todo tipo de productos a través de Internet.
De acuerdo a lo señalado por Melero, el Gobierno "ha cometido un grave error al tratar de regular esto de los productos esenciales y no esenciales", puesto que "es imposible determinar qué es esencial y qué no para las personas".
Asimismo, calificó la medida como "arbitraria", ya que cada uno de los chilenos debe definir qué productos son esenciales para su vida diaria.
Por esta razón, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio solicitó un total de tres medidas: permitir la venta de productos a través del comercio electrónico, que los comercios que están abiertos puedan vender de todo y que el resto del comercio presencial pueda volver a operar pronto, a modo de evitar quiebras y desempleos.
Por su parte, el gerente de Estudios de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), George Lever, manifestó que la medida es "innecesaria".
De acuerdo a lo señalado por Lever, las autoridades le han agregado el factor "incertidumbre" a la pandemia, puesto que las personas no saben qué productos pueden adquirir y "la situación es de una confusión que no es necesaria introducirla al sistema en un momento como este".
"En general nos parece que ha sido una medida innecesaria en tiempos de crisis como la que hemos vivido en los últimos 12 meses, ya que ha sido agregarle un factor de incertidumbre. No solamente nos preocupa que sea una mala medida, sino que además nos preocupa la poca información que ha habido al respecto", sostuvo.
Asimismo, explicó que dicha incertidumbre no solo se aplica a los consumidores, sino que también a las empresas, las cuales han sido las más afectadas desde el inicio de la pandemia.
"Las empresas no tienen claridad respecto de qué pueden vender, a través de qué medios, con qué plazos, qué tipos de entrega, si pueden funcionar sus procesos logísticos y la preparación de sus pedidos. Además, los consumidores no saben qué cosas pueden o no pueden adquirir a través de las tiendas físicas y en el comercio electrónico", indicó.