Lo que parecía ser un caso de maltrato animal terminó sorprendiendo a varios en Talca.
Un grupo de vecinos llamó a Carabineros luego que desde un vehículo estacionado se escucharan los insistentes maullidos de una gata, que parecía estar en la maleta.
Luego de unos minutos fue la propia dueña del auto quien apareció para mostrar que no habían animales encerrados, aunque los quejidos del animal se seguían oyendo.
Carabineros siguió buscando hasta dar con la gata, de sólo meses, que había quedado atrapado en el parachoques trasero del vehículo, sin que nadie supiera desde cuando permanecía acorralado allí.
Tras ser rescatado, el felino incluso encontró hogar.