El obispo de Osorno Juan Barros llegó este viernes hasta la Corte de Apelaciones de Valdivia para declarar en calidad de testigo en el marco de la investigación del caso Karadima.
El sacerdote llegó cerca de las 09.00 sin llamar la atención, pese a la gente que se encontraba en el frontis de tribunales.
Las declaraciones las realiza tras la demanda civil presentada por tres víctimas del ex párroco de El Bosque en contra del Arzobispado de Santiago y en el cual solicitan una indemnización de 450 millones de pesos, según informa La Tercera.