La Policía de Investigaciones (PDI) detuvo al cabo primero de Gendarmería, Felipe Burgos Acevedo, por su participación en el ingreso de drogas ilícitas y elementos prohibidos al recinto penitenciario de Alto Hospicio.
La investigación fue dirigida por la Unidad de Drogas de la Fiscalía de Tarapacá y desarrollada por la Agrupación de Microtráfico Cero (MT-0) de la PDI, junto con la colaboración de Gendarmería.
El imputado fue formalizado por la fiscalía por los delitos de tráfico ilícito de estupefacientes, cohecho y tenencia ilegal de municiones y elementos de uso bélico, quedando en prisión preventiva mientras dure la investigación.
El gendarme es tesorero regional de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup) y director regional de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (Anef).
El Ministerio Público logró determinar que el imputado se dedicaba en forma sistemática a ingresar drogas y elementos prohibidos a los internos del penal de Alto Hospicio.
Al momento de su detención se le encontraron tres teléfonos celulares y varios accesorios adosados a su cuerpo, y en el registro de su domicilio se halló una bolsa con 83 gramos de clorhidrato de cocaína, la cual le había sido entregada previamente por el imputado y ex gendarme Mizraín Vergara.
Este último cumple una condena por tráfico de drogas con beneficio de salida y fue formalizado el viernes pasado, quedando también en prisión preventiva.
En la vivienda del imputado se encontraron otros 11 celulares, diversos accesorios, $2.275.000 en dinero en efectivo y 67 cartuchos balísticos de distintos calibre, incluidos cartuchos para subametralladoras de uso bélico.