El papa Francisco aceptó tener una reunión con las monjas estadounidenses.
Una prominente monja estadounidense criticó públicamente el tratamiento que el Vaticano le da a su congregación, la más grande de Estados Unidos.
La hermana Florence Deacon, presidenta del grupo Leadership Conference of Women Religious, declaró en una convención religiosa en Roma, Italia, que las monjas estadounidenses están profundamente dolidas por un informe del Vaticano del año pasado.
El documento acusaba a su grupo de fomentar el feminismo radical y debilitar las enseñanzas de la Iglesia sobre el control de natalidad y la sexualidad.
Además, el Vaticano designó tres obispos para que supervisaran la organización.
El papa Francisco ha accedido a encontrarse con el grupo. Su predecesor, Benedicto XVI, rehusó hacerlo durante una conferencia de las monjas hace tres años.