La mejor muestra de las bajas temperaturas es el estanque de agua del pueblo, que amaneció completamente congelado. A pesar de las bajas temperaturas los alumnos de la única escuela asisten de todos modos a clases y mantienen una asistencia ejemplar.
Los 14 grados bajo cero registrados esta mañana es una constante en Ollagüe, sus habitantes dicen que están acostumbrados, de hecho a las 9 de la mañana, con 6 grados bajo cero, los 33 alumnos de la escuela llegan con normalidad a clases al igual que quienes se dirigen a sus trabajos,
Los Ollaguinos se guían por el termómetro que está en la entrada al policlínico, allí queda registrada la mínima y la máxima del día, son cerca de 130 personas que viven en Ollagüe, entre población flotante y residentes. Un lugar que está acostumbrado a recibir fuertes lluvias y vientos que superan los 100 kilómetros por hora. Por las calles de Ollagüe es difícil encontrarse con personas, todos trabajan y cuando termina la jornada laboral se van directo a sus hogares a pasar el intenso frío del invierno que ya llegó y con una de las temperaturas más extremas del país.