De acuerdo a la información entregada por los arqueólogos de National Geographic, fue encontrada en la costa norte de Perú la evidencia del que podría ser considerado como el sacrificio masivo de niños más grande de América.
Más de 140 niños y 200 llamas jóvenes parecen haber sido sacrificados en lo que podría ser un ritual, evento que tuvo lugar hace unos 550 años en un acantilado azotado por el viento en lo que en dicho entonces era la capital en crecimiento del Imperio Chimú.
Aunque hay registros de que en la cultura de los aztecas, mayas e incas sí se realizaban sacrificios, el descubrimiento de esta masacre de niños a gran escala no tiene antecedentes, ni en la región ni en el mundo.
De acuerdo a la datación con radiocarbono que se hizo, se determinó que las sogas y productos textiles que se encontraron en el lugar podrían ser del 1400 y 1450.