Samsung pretende mantener el liderato del mercado de los smartphones, y para ello se la juega con una revolucionaria innovación: el teléfono flexible.
Según The Wall Street Journal, la compañía surcoreana comenzará a fabricar móviles con pantalla flexible durante 2013.
Se trata de una pantalla hecha de plástico -no de vidrio- que pretende proporcionar mayor resistencia a los golpes y a las caídas haciéndolo casi irrompible.
Las nuevas pantallas utilizan la tecnología OLED, que la compañía ya utiliza en televisores y smartphones, gracias a que los diodos orgánicos emisores de luz pueden introducirse en materiales flexibles como el plástico o el papel de aluminio.
La compañía está en la última fase de desarrollo de las denominadas pantallas flexibles que serían presentados el primer semestre del próximo año.