Seis meses después de las históricas 10 presentaciones en el Movistar Arena, Luis Miguel regresó a Chile con dos conciertos totalmente vendidos en el Estadio Nacional, recinto al cual volvió después de 18 años.
El artista mexicano, cuyo estado de salud y vocal mejoró notoriamente en relación a su visita en agosto y septiembre, cautivó al público apenas apareció en la tarima con una presentación impecable en sonido y puesta en escena. "Será que no me amas", "Amor, amor, amor" y "Suave" encendieron a una audiencia que reunió a varias generaciones que crecieron con la música de "Micky".
De los animados pasos de baile y gestos a sus "incondicionales", el intérprete dio paso a su faceta más romántica con baladas como "Culpable o no" y los incombustibles "Por debajo de la mesa", "No sé tú", "Somos novios" y "Nosotros" que forman parte del catálogo de boleros.
Asimismo, deleitó con duetos virtuales junto a Michael Jackson y Frank Sinatra como también con un 'set' de mariachis que incluyó los clásicos "La Bikina" y "La media vuelta". La nostalgia también tuvo espacio con "No me puedes dejar así" y "Palabra de honor", canciones con las cuales dio sus primeros pasos en la música, sin embargo, el momento de efervescencia llegó con "La incondicional", segmento donde las fanáticas levantaron globos blancos y mensajes que Luis Miguel agradeció.