Pedro Pascal arrasó en su debut como presentador y estrella principal de Saturday Night Live (SNL), uno de los programas de televisión más importantes de Estados Unidos.
En concreto, el actor nacional participó en la mayoría de los segmentos de comedia, además de realizar un emotivo y cómico monólogo de apertura.
En uno de estos bloques, Pascal interpretó a un hombre que estaba hospitalizado y que, debido al diálogo y a la forma de hablar de los actores, casi ninguno podía contener la risa.