Muchos los vieron llegar y comenzaron a vitorearlos, a tomarles fotos y a grabar su visita. Pero no sabían que se estaban burlando de ellos.
Fue la última aparición de la banda Foo Fighters el fin de semana recién pasado, quienes se movilizaron sobre una camioneta acompañados de la canción "Never Gonna Give You Up" de Rick Astley para mofarse de una marcha homofóbica en Estados Unidos.
La banda liderada por Dave Grohl se encontraba en Kansas para realizar un concierto en el City Sprint Center, jornada en la que decidieron hacer algo contra una ya conocida protesta. La Iglesia Baptista de Westboro ya había hecho lo mismo cuando la banda se presentó en el mismo sitio en 2011, fecha en que también decidieron salir a reírse de ellos.