Cuando él los soltó, ambos corrieron a gran velocidad y no alcanzaron a ver que más adelante se encontraba la piscina, cayendo en el fondo de ésta.
En ese momento Johnson corre a gran velocidad, completamente vestido, y nada hasta el fondo de la piscina para rescatar a "Brutus", quien luego de vomitar un poco de agua lo miró como diciendo "Gracias a Dios que no tienes que hacerme respiración boca a boca".
Termina contando que con esta hazaña aprendió algunas lecciones: "A) No todos los cachorros tienen el instinto de nadar a lo perrito. B) Algunos cachorros (como BRUTUS) están tan en shock al experimentar con el agua que se hundirán muy rápido, así que hay que reaccionar rápido. C) Para salvar la vida de sus cachorros, antes de sumergirse en la piscina, hay que tratar de tirar su teléfono a un lugar seguro. No lo guarde en el bolsillo ... como yo lo hice".
Fotos: Instagram
24HORAS.CL TE RECOMIENDA: