Cuatro horas bajo la lluvia.
Ese fue el panorama que tuvieron los fanáticos australianos de Madonna quienes se llevaron una gran decepción tras la larga espera para que comenzara el show íntimo al que ella los había invitado.
La "reina del pop" regaló 1.500 entradas a los integrantes de su club de fanáticos para que la vieran en el Forum Theatre, en Melbourne, en medio de su gira que incluye Sydney y Brisbane.