Metallica volvió a tocar en un presidio, al igual que lo hiciese en 2003, cuando realizó su primera presentación en vivo junto a su -por esos días- nuevo bajista, Robert Trujillo, en la mítica cárcel de San Quintín, ubicada en la bahía californiana de San Francisco. Ahora el cuarteto se presentó tras las rejas del centro penitenciaro de Statsfængsel en Dinamarca.
Los terrenos de la cárcel de Statsfængsel
Se espera que la misma placa lanzada 21 años atrás sea interpretada íntegramente durante su presentación el 9 de junio en el Download Festival, que tendrá cita en Donnington Park del 8 al 10 de junio.