John Galliano dio este viernes en París un paso más hacia la completa fusión de géneros, colocando al hombre corsés, plumas y pañuelos, en un intento de redefinir "una nueva masculinidad" para Maison Margiela.
Mientras Madeleine Vionnet y Paul Poiret fueron los primeros diseñadores en liberar a la mujer del corsé, el creador británico lo adaptó en su nueva colección para el vestuario masculino: se lleva como un cinturón color carne sobre una chaqueta de traje oscuro, o bien con un estampado de leopardo sobre un pantalón rosa de vinilo.
La seda también tiene cabida, en prendas transparentes superpuestas a una camisa o una chaqueta, inmovilizando en ocasiones los brazos de los modelos. Galliano, que dijo estar reflexionando así sobre "la manera de redefinir una nueva masculinidad", anunció que su colección en septiembre próximo será mixta.