Las primeras reacciones al piscinazo de la reina del Festival de Viña del Mar, Kika Silva, mostraron decepción de parte de los que vieron en directo el tradicional espectáculo en la Ciudad Jardín.
En su mayoría, los comentarios apuntaron que la performance estuvo "fome", aunque se valoró el segundo piquero de la modelo, que contó con un salto mortal.
Tras cumplir con la tradición, Kika Silva dio a entender que su show estuvo condicionado por la situación de los aluviones en la zona central y las protestas registradas este sábado y que obligaron a postergar por un día el piscinazo.