Con la pandemia, el encierro se transformó en un punto de reflexión sobre sus vidas, una circunstancia que lo hizo decidir cambiar en 180 grados. Para ello, Cristian y Jorgelina iniciaron una nueva aventura abordo de un camión de bomberos: “No nos íbamos a quedar toda la vida en el mismo lugar”.
Sus vidas se enfocaban en la administración de empresas, ambos dedicado a lo mismo, pero uno más cercado a la docencia y el otro focalizado en el comercio. Una carrera a la que se sumanaba el tiempo en famiia para llevar la crianza de las pequeñas Abril y Julia: “Estuvimos pensando la idea durante meses, hasta que concluimos en que lo que buscábamos era cambiar el estilo de vida" señalaron al TN.