Ocurrió en diciembre de 2018 en Irlanda, pero el trauma se mantiene en Kirsten Kinch, joven de 23 años que dejó a su perrita "Nova" en una guardería debido a un viaje, pero se la devolvieron muerta y dentro de una bolsa.
La aludida decidió comentar su historia en Instagram, dando cuenta que un viaje familiar impidió dejar a su amada mascota en soledad.
Por ello, fue al recinto de nombre P&E para sus servicios, en donde a los pocos días comunicaron que el animal había muerto.