Muchas veces los padres toman todos los cuidados para que sus hijos y sobre todo los más pequeños no se enfrenten a ningún riesgo, pero incluso así hay cosas que pasan por alto por desconocimiento y que pueden ocasionar consecuencias muy graves.
Eso fue lo que le ocurrió a Alex Upton, una joven madre de 26 años que quiso dar a conocer su caso para que otros padres no tuvieran que pasar un gran susto como el que sufrió ella.
Alex tiene un hijo de sólo dos meses y medio que casi perdió uno de los dedos de su pie por culpa de un pelo de ella misma que se enrolló sin que se diera cuenta.
Según contó la madre del pequeño, notó que algo iba mal cuando al despertar Ezra no quiso tomar su leche y lloraba sin parar, pero no fue hasta mucho rato después cuando lo cambió que se dio cuenta que algo había en uno de sus dedos.
“Temía que Ezra pudiera perder algunos de sus dedos del pie y fácilmente podría haber necesitado que se los amputaran si no hubiera notado el cabello en ese momento. Debe haber estado allí durante 12 a 14 horas porque sólo lo noté por la mañana”, dijo en una entrevista a Daily Mail.