Jay Flatland y Paul Rose son dos ingenieros que pasarán a la historia.
Ambos profesionales quisieron demostrar que podían crear una máquina que armara un cubo Rubik en tiempo récord. Usando un logaritmo especial y motores de impresoras 3D lograron resolver el cubo de colores en sólo1,047 segundos.
Los profesionales se encuentran en proceso de validar la marca que obtuvieron gracias a su robot en el libro de Récord Guinnes.
Usando cámaras de video, además de herramientas que mueven las piezas, ambos profesionales lograron su cometido.
El anterior récord oficial le pertenece a un robot creado en Florida y que tardó más de dos segundos en lograr el difícil cometido de unir por colores las cuatro caras del cubo.